Este espacio está creado por Liliana Bonavita, quien en sus poemas recrea a los navegantes contando historias y deleitando a quienes con pasión disfrutan de la naturaleza y el amor.
Espero que me acompañen en este hermoso transitar por la tierra y el agua.
Buenos Vientos!!!!
Liliana
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4 comentarios:
Hola Lily, estoy dispuesto a visitar la página para leer lo que vayas publicando. Los que ya adelantaste, son muy lindos.
jose-canaima
Até mis sueños en la cornamusa, salí en libertad a contemplar y recorrer rios y mares, hasta que salieron conciliadores soles en la noche.
Navegando a sotavento, extendí mi cuerpo y el alma sobre la fuerte y vigorosa crujia que soportó el peso de la vida con sus tristezas y alegrias.
Todo se fundió como un sueño, mi sueño y como fantasma errante en el inconmensurable Universo, puso colores, sonidos, dando imagen a la calidez de las velas que guiaron mi destino hasta las profundidades de los azules mares y tomaron la fuerza de la guindeleza para anclarse en la existencia de la vida.
Armé miles de cabezas de cebolla y a cada aparición mágica de un conciliador amor, las arrojé como signo de mi plenitud y un corazón al fin, tuvo una carroza para protegerse de la intemperie.
Quise desaparecer y reposar para saldar mi deuda en un mejestuoso silencio.
Liliana Bonavita
2006 (UBA)
Si te aburre, no lo leas.
Soy la cornamusam aunque tú nolo creas.
A tí te hablo con voz serena para que me entiendas, que tambien soy un barco y que tú timoneas.
Donde irás no lo sé?
Veo el horizonte, de aquel no se qué!
Encuentro un cabo y espero hacer un nudo a nuestras vidas y para qué?
Si tan rápido lo cacé también lo filé.
Estoy por atarlo a la guindaleza sin saber como lo haré!
Será correcto el paso u otra vez me equivoque´?
Tan pronto lo sepa te lo demostraré con un dulce beso que transportado a barlovento o a algún lugar lejano, tu y yo, arribaremos para confundirnos entre las crestas de las olas.
Viviremos las noches y los días in tumultos, ni bocinas, bocinas que aturden los oidos y sacuden las mentes.
Piensa en nuestra maravillosa libertad.
Liliana Bonavita
2006 (UBA)
Pinté con colores un barco sin viento, la vela mayor miraba y el foqué sin guitarra cantaba.
arrímate a la crujia que para pintar no se necesita cornamusa ni carroza, porque las guindaleza sostiene mi humilde talento.
Toma el pincel, píntalo ahora a barlovento, que si te queda en ceñida, te destiñe la vela sobre el firmamento y despues de un instante te queda mi sombra con el barco pintado, aunque tu no lo creas
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